El lunes 18 de octubre, don Felipe Ramírez, líder de la comunidad indígena Y’aka Marangatu, del pueblo Mbya Guaraní, de Itapúa, denunció que varias maquinarias pesadas ingresaron sin permiso y en la clandestinidad a las tierras aseguradas que fueran expropiadas para su comunidad. Con este hecho, no solo se está violando el derecho territorial sino además las medidas cautelares vigentes sobre dichas tierras.
Cabe destacar, que estas tierras fueron expropiadas dentro del proceso de Acuerdo de Solución Amistosa (ASA), entre el Estado Paraguayo y la Comunidad, ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Los miembros de la comunidad denunciaron el hecho que violenta la vida y los medios de vida de la comunidad, además de su territorio. La comunidad integra la Asociación de Comunidades Indígenas de Itapúa, que a su vez está articulada a la FAPI
Se puso a conocimiento del grave hecho tanto al Instituto Paraguayo del Indígena (INDI) como también a la Fiscalía General del Estado, donde se solicita a ambas Instituciones tomar los recaudos legales para garantizar la vida, los medios de vida y su territorio de manera urgente. Además, de constituirse en la comunidad para recabar los datos pertinentes, verificar los hechos y acompañar a la comunidad de manera más efectiva
Es importante recordar que en septiembre del 2020 el gobierno paraguayo había sancionado la Ley 6.615/2020, que declara de interés social y expropia a favor del Instituto Paraguayo del Indígena (INDI), para su posterior adjudicación a la comunidad Y’aka Marangatu, con finca N° 581, padrón 911, con una superficie de 219 hectáreas, 4.112 metros cuadrados.
Este hecho histórico se dio dentro del proceso de negociación ante el sistema interamericano. Cabe mencionar que la comunidad Y’aka Marangatu inició sus trámites legales de legalización de sus tierras hace más de 25 años, logrando por fin el año pasado la expropiación, pero aún no la seguridad jurídica de la misma.